The Coffee Bean & Tea Leaf entrarán a Nueva York, compitiendo contra Starbucks
El vendedor independiente de café anunció el martes que planean abrir 100 ubicaciones de franquicia en la ciudad de Nueva York en la siguiente década, por lo tanto, apostando contra la “fatiga Starbucks” y entrando a la guerra de café en la ciudad.
Hay aproximadamente 1,200 tiendas abiertas en numerosos países de todo el mundo. Pero, aun así, el Coffee Bean & Tea Leaf planea ir más allá y entrar en las guerras del café de la ciudad de Nueva York. Vienen con una estrategia agresiva de crecimiento y marketing en un momento en el que otras empresas están dando un paso atrás.
El minorista con sede en Los Ángeles está planeando abrir sus primeras oficinas de franquicias en Manhattan para finales de este año y durante los próximos 10 años, la compañía tendrá no menos de 100 tiendas abiertas en toda la ciudad de Nueva York, o así lo anunciaron el martes 26 de junio.
“Una de las cosas que estamos haciendo ahora es que estamos emprendiendo un crecimiento agresivo de las franquicias en los Estados Unidos para seguir el ritmo de lo que está pasando a nivel internacional”, dijo John Fuller, que es tanto el CEO como el presidente de la cadena, en una entrevista.
La mayoría de los cafés Coffee Bean & Tea Leaf están ubicados hoy en Asia, alrededor del 75 por ciento de todos los cafés de la cadena. De los demás, que están en Estados Unidos, la mayoría están en el sur de California.
Según los expertos, este es en realidad un gran momento para que una cadena de café y té entre en el mercado y crezca en Manhattan, ya que los alquileres finalmente están disminuyendo en la región, proporcionando así a más empresas la oportunidad de venir a Nueva York.
Además, la “fatiga de Starbucks” podría resultar ser una gran ventaja para el Coffee Bean. Hoy en día, se ve un café Starbucks en cada esquina y la gente podría querer un cambio en el paisaje.
“Eso nos ayuda a nosotros y a otras marcas”, explicó Fuller. “No somos tan corporativos. Nosotros somos los que decidimos”.
Tener “té” en el nombre también puede ser una ventaja, especialmente para aquellos clientes interesados en las bajas calorías y bebidas más saludables.
“La próxima generación no son bebedores de soda”, mencionó Fuller. “Son bebedores de café y té.”